Se caracteriza por la presencia de
dolor exclusivamente en la parte medial del hueso de la tibia y principalmente en
los dos tercios inferiores, se le considera un síndrome de corredores novatos o
principiantes, aparece por correr en terrenos demasiado rígidos, uso de tenis inadecuados
o bien un problema biomecánico, ocasionando jalones repetitivos del tendón del músculo
tibial posterior y este estrés nos produce un cuadro clásico de tendinitis. El dolor
aumenta en forma gradual y lo que al principio puede ser una molestia vaga, al continuar
entrenando hace que el dolor se haga más constante durante la carrera y después de ella.
En los casos más severos el dolor se presenta con el simple hecho de caminar o subir
escaleras. Es recomendable que cuando se noten
los primeros síntomas se trate de descansar un poco de la carrera, se aplique hielo y un
vendaje compresivo en la parte afectada, ya que si continuamos corriendo provocamos que la
lesión se vuelva crónica y dificultamos su tratamiento. |
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